En una tarde calurosa, ella se puso el vestido floreado lleno de rosas y margaritas, los esclavos se pusieron a hacer unos ricos y sabrosos buñuelos para la dama.
- José, tráeme unas empanadas criollas bien calentitas!!- Si mi dama.
Ella se fue con su caballero, vestido con un frak negro. Como Lala no tenía nada para hacer se puso a baldear el piso y a limpiar la habitación de la dama, mientras ellos realizaban un paseo en carruaje con amigos, todos se divirtieron muchísimo.
La pareja tuvo trece hijos y fueron felices por siempre.
Lala estuvo siempre al lado de ellos, ayudando y acompañando la familia.
Autora: Priscila Mansilla
Edad: 8 años
Que bonito cuento!!! Muy lindo Priscila, segui escribiendo asi de lino, me gustó tu dibujito!!!
ResponderEliminarMuy lindo tu cuento. Tambien me gusto como dibujas. Te felicito.
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